El refrigerante G13 es un tipo de refrigerante para sistemas de enfriamiento de automóviles que se utiliza en algunos vehículos. A diferencia de los refrigerantes más antiguos, el G13 está formulado para tener una vida útil más larga y proporcionar una mejor protección contra la corrosión. Y ha sido desarrollado por el Grupo VAG. Que lo empezó a utilizar a partir del año 2008.
Vaso de Expansión
En los vehículos del Grupo VAG que utilizan este refrigerante, el vaso de expansión lleva dentro una bolsa con silicato. Y es algo que puede acabar en enormes problemas. El problema es que según pasa el tiempo y se le hacen kilómetros al vehículo, la bolsita con los silicatos acaba degradándose y rompiéndose. Entonces los silicatos acaban en el sistema de refrigeración. Y como resultado, nos han llegado muchos vehículos a Pavari Motor con bombas de agua y termostatos rotos, manguitos y tuberías deteriorados, etc…
El anticongelante G13 es de por si muy corrosivo con ciertos materiales, como las superficies metálicas. Es por ello que le agregan la bolsita de silicato en el vaso expansor. El silicato, específicamente el silicato de sodio, se agrega al refrigerante o se utiliza como revestimiento en el interior del vaso de expansión para proporcionar protección contra la corrosión y teóricamente para mejorar la vida útil del sistema.
Llevamos más de 250 vehículos con problemas por el G13. En mayor o menor medida. A veces con quitar la bolsa de silicato, purgar el anticongelante y poner G12 EVO ha sido suficiente. En otras ocasiones, el propietario del vehículo a tenido que hacer un alto desembolso porque había piezas que debían ser sustituidas para evitar males mayores.
La realidad
La realidad es que las buenas teorías del Grupo VAG sobre el G13 y el silicato, realmente no se han cumplido. Precisamente porque el sobre que contiene el silicato, normalmente en bolitas, se acaba rompiendo. Esas bolitas se distribuyen por el sistema de refrigeración, crean atascos y acaban en averías. El Grupo VAG no reconoce ese problema. Y todos los gastos derivados de ese tipo de averías, se hacen a cargo del propietario del vehículo. Salvo que aun este en garantía.
Qué hacemos en Pavari Motor
Lo primero de todo, cuando tenemos el vehículo en nuestras instalaciones, es una revisión completa del sistema de refrigeración. Ver como funciona el coche. Si tiene pérdidas o fugas. Hablar con el cliente para saber si tiene que estar rellenando o no el vaso expansor con anticongelante, etc. Y obviamente, hacer una comprobación visual del sobre con el silicato. Ver si esta roto o no.
Pasos a seguir
En ese momento, analizamos si es suficiente con quitar la bolsa de silicatos, hacer la purga de refrigerante y un lavado del sistema de refrigeración. Y rellenar con G12 EVO. O si por el contrario, hay alguna pieza afectada que hay que sustituir. Por lo que procedemos a explicárselo al cliente y darle presupuesto de dicha reparación.
Riesgos sacando la bolsa de silicatos
Hay ocasiones, en las que sacando la bolsa de silicato con unas pinzas y un poco de cuidado y paciencia es suficiente. En ese momento, tenemos además que verificar que la primera impresión de que la bolsa de silicatos no esta rota era la impresión correcta.
Pero en otras ocasiones, no es posible sabar la bolsa de silicatos con una pinza. La fuerza que hay que hacer es superior a la que va a aguantar la bolsa y se va a romper. Pudiendo quedar bolitas que posteriormente afecten al sistema. Y en esos casos, que no han sido muchos, hemos aconsejado al cliente cambiar cmpletamente el vaso expansor del vehículo. Una solución mucho más económica que lo que supondría un desembolso posterior si se han quedado bolitas de silicato.
Es una pena que el Grupo VAG no haya querido poner solución mucho antes a este problema. Que realmente no reconoce. Hemos tenido que cambiar bombas de refrigerante a vehículos con 50.000km y 60.000 km. Cuando realmente debería aguantar cerca a los 200.000km – o 10 años – según la recomendación de la marca.
Jefe de Taller – Alfonso Arias
Por eso, en Pavari Motor , siempre que nos viene un vehículo del Grupo VAG aunque sea para un simple cambio de aceite y filtros, siempre miramos su sistema de refrigeración. Porque con muy poco esfuerzo, podemos ahorrarle al cliente gastos elevados en reparaciones futuras.
